Prevención en la protección de la infancia y la adolescencia

Publicado en «El Periódico de Catalunya», el 7 de abril de 2016

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Los casos de bebés robados que por fin están llegando a los Tribunales son la punta de iceberg de un sistema ancestral de protección de la infancia que presenta serias carencias. Los servicios sociales, con su infinidad de técnicos y unas dotaciones presupuestarias importantes, se dedican fundamentalmente a intervenir en las situaciones que ellos consideran de riesgo, y no a ayudar a las familias que pasan por situaciones de dificultad.

Nadie entendería, por ejemplo, un sistema de salud público que solo se dedicara a intervenir quirúrgicamente a los pacientes, y no contemplara la atención primaria bajo la excusa de que esa no es su competencia. La atención a la infancia y la adolescencia no se debería limitar, casi exclusivamente, a retirar tutelas con protocolos muy cuestionados.

Los hijos que están buscando a sus padres biológicos, o los padres que buscan a sus hijos arrebatados al nacer, en ejercicio del legítimo derecho a conocer los orígenes, no están atravesando situaciones demasiado diferentes a la de miles de familias que ven cómo sus hijos son tratados injustamente por nuestro sistema de protección, que en vez de trabajar la prevención, de ayudar desde el principio, se dedica sobre todo a la intervención, cuando las soluciones son mucho más difíciles y costosas.

Esperemos que esta vez, cuando se haya tranquilizado el panorama político, se aborde de una vez la reforma de la protección de los niños y adolescentes, asignatura pendiente de nuestro estado de bienestar.

Francisco Cárdenas es presidente de Aprodeme